sábado, 25 de octubre de 2008

He visto en medios de comunicación antiguos "compañeros" tratando de convencernos de que la Democracia es solo votar por candidatos "iluminados". Recordé la canción de Victor que quiero dejar...


Tiernamente amigos
Victor Heredia

Eramos como quien dice tiernamente amigos
Dos pequeños vagabundos a lomo de río,
En nuestro pequeño bote de madera
Ibamos pariendo luz de primavera
A los trece un niño no miente cariño,
Y les puedo asegurar que no tuve nunca más un amigo igual.

Nos juramos de por vida ser amigos fieles,
Entre novias y poemas, risas y burdeles.
Nunca separarnos, libertad o muerte.
Siempre defendernos, sueño adolescente.
A los diecisiete vida es utopía
Y les puedo asegurar que no tuve nunca más un amigo igual

Desandamos tantas veces el camino andado,
El perdió su fe y a veces nos telefoneamos.
Ya no tiene gracia nuestra verborrágia
Yo sigo montando sobre el mismo río
El vendió sus sueños y acortó caminos.
Mas les puedo asegurar que no tuve nunca más un amigo igual

El perdió lo suyo y yo también perdí lo mío
Algo nos cambió el perfume tierno del estío
Entre bambalinas yo juego a estar vivo
El cepilla un perro todos los domingos
Ya no creo que recuerde nuestro río
Más les puedo asegurar
que no tuve nunca más,un amigo igual

Aún recuerdo su sonrisa y siento que el destino
Es como algunas botellas donde duerme el vino
Unas se conservan y otras se avinagran,
Y aunque el tiempo mate ciertas bellas almas
Siempre guardo lo que fuera suyo y mío,
Y les puedo asegurar
que no tuve nunca más un amigo igual

Elecciones

Con motivo de las elecciones municipales quiero compartir un articulo interesante...<

La despolitizacion de la politica
frei-betto
Una campaña electoral se gana con la televisión. En toda elección los partidos contratan equipos para cuidar la imagen de sus candidatos. Generalmente el equipo está dirigido por un publicista que no pertenece al partido, ni simpatiza con el partido, ni vota por el partido. Pero que tiene fama de competente. Ahora bien, competencia rima con conciencia. Cualquier manual de mercadeo, de esos que enseñan a vender polución atmosférica para ecologistas, aconseja al vendedor estar convencido de la calidad de su mercancía. Por eso, en muchas campañas el programa de televisión fracasa. Entonces se cambia de publicitas, de equipo y de estilo. Y se confunde al elector, pues, de una u otra manera, el candidato moderado se vuelve extremista o viceversa.Es más dramático aún constatar que se cambia la ética por la estética. No importa si el candidato es un malandrín, corrupto o incompetente. Una buena imagen habla más que mil palabras. Y así se va dando una progresiva despolitización de la política, lo cual es uno de los objetivos del neoliberalismo. Se saca la política del ámbito público como herramienta de promoción del bien común, para reducirla al ámbito privado, a la selección de candidatos basada, no en propuestas y programas, sino en simpatías y empatías. La razón es sencilla: en el sistema capitalista la política es teóricamente pública y la economía privada. Se universaliza el voto y se privatiza la riqueza. Si en Brasil hay más de cien millones de electores, en sólo 19 millones se concentra el 75.4% de la riqueza nacional (Ipea, mayo 2008).En una verdadera democracia la universalización del voto debiera coincidir con la socialización de las riquezas, en el sentido de asegurar a todos una renta mínima y los tres derechos básicos, por orden: alimentación, salud y educación. Como eso no aparece en la agenda del sistema, se intenta invertir el proceso: se inocula en la población el horror a la política, de modo que ésta quede relegada al dominio privado de unos pocos. Quien tiene desdén por la política es gobernado por quien no lo tiene. Y los malos políticos hacen lo imposible para utilizar el poder público en beneficio de sus intereses privados.Véase, por ejemplo, el movimiento en pro del voto facultativo. Lo que muchos hacen ver como positivo y concordante con la libertad individual es una manera de excluir a una parcela considerable de población de las decisiones políticas. De ese modo aumenta el grado de alienación de los potenciales electores. Cuando preguntan mi opinión digo con franqueza: estoy a favor, siempre y cuando sea facultativa también la actual obligación de pagar impuestos. ¿Por qué voy a estar obligado a sustentar económicamente al Estado y desentendido de influir en su configuración y en su rumbo? El desinterés por la política es uno de los síntomas nefastos de la ideología neoliberal, que trata de desunir a los ciudadanos para individualizarlos como consumidores. Se cambia el principio cartesiano “pienso luego existo” por el principio mercantilista “consumo luego existo”. Y en este sentido es como la propaganda electoral se reviste también de mercancía. No se ofrecen ideas, programas de gobierno, estrategias a largo plazo, sino promesas, estadísticas, imágenes de impacto.Si hay aspectos positivos en las restricciones oficiales a las campañas electorales, porque dejan la ciudad limpia y evitan que los comicios atraigan público, no en función del candidato sino de los artistas en el escenario, es obvio que favorecen a quien tiene más dinero. Y en tanto no llega la prometida reforma política, así como el financiamiento y el control público de las campañas, la segunda caja prosigue haciendo la alegría de quien pasa por ético pero al mismo tiempo recauda recursos turbios y criminales.Es hora de abrir el debate sobre las elecciones 2008 en todos los espacios institucionales y populares: escuelas, empresas, denominaciones religiosas, clubes, asociaciones, sindicatos y movimientos sociales. No se trata de favorecer a éste o a aquel candidato, sino de fomentar el distanciamiento crítico frente al mercadeo electoral y resaltar los criterios de discernimiento político.Si la sociedad no se empeña en la educación política de sus ciudadanos dentro de poco tendremos parlamentos y ejecutivos ocupados solamente por corruptos, milicianos, negociadores y fundamentalistas. Y el Brasil se verá reducido a una inmensa Chicago de los años 30, con los Al Capone jugando sus cartas en contra de las leyes, por un lado, y a los Bin Laden en versión guaraní por el otro, convencidos de que, en nombre de su religión, fueron escogidos por Dios para gobernar erradicando el pecado, o sea combatiendo a sangre y fuego a todos cuantos no rezan por su catecismo

martes, 14 de octubre de 2008

Hablabamos con John Elmore en Arica. Sobre la vida, lo que entendemos y hacemos entender a otros. El decía que al visitar las Iglesias en Estados Unidos la gente espera un gran discurso, elementos teologicos o ideas impactantes. Lo que el comparte es sobre la disposición de cada uno de nosotros frente a Dios. Poner en las manos de Dios lo que somos y tenemos; sin pretenciones ni espectacularidades. Solo vida y saber vivirla.
La cancion de Mercedes Sosa de eso nos habla.

Honrar La Vida

Mercedes Sosa

Nó...! Permanecer y transcurrir
no es es perdurar, no es existir,
ni honrar la vida!
Hay tantas maneras de no ser
tanta conciencia sin saber, adormecida...
Merecer la vida, no es callar y consentir
tantas injusticias repetidas...
Es una virtud, es dignidad
y es la actitud de identidad más definida!
Eso de durar y transcurrir
no nos dá derecho a presumir,
porque no es lo mismo que vivir
honrar la vida!

Nó...! Permanecer y transcurrir
no siempre quiere sugerir
honrar la vida!
Hay tanta pequeña vanidad
en nuestra tonta humanidad enceguecida.
Merecer la vida es erguirse vertical
más allá del mal, de las caídas...
Es igual que darle a la verdad
y a nuestra propia libertad la bienvenida!
Eso de durar y transcurrir
no nos da derecho a presumir
porque no es lo mismo que vivir
honrar la vida!